Un sistema GRC ayuda en la optimización de procesos y la reducción de la incertidumbre que los riesgos corporativos y el nivel de cumplimiento pueden generar en las organizaciones. Su objetivo es que sean más robustas, resilientes y gestionen correctamente el cumplimiento legal y normativo.
Un sistema GRC propone crear y coordinar políticas y controles, que respondan a la materialización de un riesgo o a los requisitos de cumplimiento de la organización. Además, permite la automatización de muchos procesos lo que aumenta la eficiencia y reduce la complejidad.
¿Por qué involucrar todas las áreas para el éxito del sistema?
Todas las áreas de la compañía deben estar involucradas en el sistema GRC que se vaya a implantar, ya que disponen del conocimiento necesario sobre sus procesos, actividades y la información que tratan.
Serán los encargados de participar en el análisis de riesgo y en las evaluaciones de cumplimiento que se precisen, así como contribuir en la valoración de los riesgos teniendo en cuenta el impacto y la probabilidad de ocurrencia de la materialización de las amenazas a las que están expuestos los procesos de sus áreas de responsabilidad.
Asimismo, serán los encargados de la eficacia de las medidas de control implementadas en sus procesos, funcionen de forma eficaz, con el objetivo de mitigar los riesgos identificados o cumplir con normativa o legislación aplicable.
¿Qué pasaría si no lo hacemos?
Si no se involucra a todas las áreas se estaría incumplimiento el objetivo de disponer de una cultura organizacional que puede derivar en los siguientes riesgos y repercutir en el negocio:
- Incumplimiento de normativas o legislación aplicable, lo que puede acarrear sanciones a la compañía o pérdida de credibilidad por parte de los clientes.
- Falta de cultura organizativa en la gestión de riesgos.
- Mayor incertidumbre en la consecución de los objetivos de cada proceso operativo.
- Falta de conocimiento de los objetivos del gobierno corporativo.
- Inadecuados canales de comunicación entre los diferentes niveles de la organización.
- Resistencia al cambio.
¿Qué roles debe haber en un sistema GRC?
Las empresas que llevan a cabo una gestión integrada de riesgo y cumplimiento, así como también la adopción de medidas para el cumplimiento normativo, pueden conseguir muchos beneficios, entre los cuales se menciona:
- Ampliar la escala de oportunidades disponibles al tener en cuenta todas las posibilidades.
- Identificar y gestionar los riesgos en toda la entidad, y, en consecuencia, sostener y mejorar el desarrollo.
- Aumentar las ventajas a la vez que se reducen las situaciones negativas, producto de identificar riesgos y establecer respuestas adecuadas.
- Mantener alto los estándares de calidad e imagen de la empresa.
- Profesionalizar la función de cumplimiento, dotándola de recursos y procesos que garanticen su operatividad.
- Reducción de problemas legales y administrativos.
- Mejorar el despliegue de recursos al disponer de una información sólida sobre los riesgos, que permite una evaluación de las necesidades generales de recursos y establecer prioridades en su despliegue y asignación.
De esta manera, se concluye que es de gran relevancia para las empresas, implementar un sistema de gestión integral de riesgo y cumplimiento. No sólo porque va a garantizar un buen funcionamiento de sus actividades empresariales, sino porque también aportará muchos beneficios en términos económicos, sociales y laborales. Sin olvidar que lograr una sinergia entre todas las áreas de la empresa en cuanto a riesgo y cumplimiento concierne, será un atenuante a la hora de incurrir en una posible infracción normativa.
¿Cómo ajustamos todo?
Con el objetivo de gestionar correctamente los riesgos a los que se expone una empresa, se debe asegurar el cumplimiento de las medidas de control implantadas mediante un sistema de control interno. Donde se diseñen e implementen procedimientos que sirvan para evidenciar el funcionamiento y la eficacia de los controles, así como tareas de supervisión de estos procedimientos.
Por otra parte, se debe velar por el cumplimiento normativo de la organización, ejecutando las tareas de supervisión de las medidas de control establecidas para cumplir con todos los requisitos identificados.
Finalmente, se debe establecer un proceso de auditoría interna para disponer de una visión independiente y objetiva sobre el control del riesgo y el nivel de cumplimiento, y permitir la revisión de la eficiencia y la eficacia de las medidas de control implantadas. El objetivo es conseguir un adecuado marco de control interno.
Los resultado e incidencias del sistema GRC deben ser reportados a la Alta Dirección.
En este sentido, desde GlobalSUITE Solutions ofrecemos soluciones para abordar todas las tareas necesarias en la ejecución y mantenimiento de un sistema GRC, tanto desde el punto de vista de la centralización y automatización de los procesos necesarios en nuestro software GRC como de consultoría.
Gracias a la utilización de la plataforma, todos los responsables implicados podrán acceder a un mismo punto de información, disponer de una gestión de riesgos multidisciplinar con la capacidad de extraer información filtrada, además de establecer un sistema de auditoría que recopile todas las evidencias necesarias.